Un concurso con final abierto
El INTA Entre Ríos renueva a su director regional. Hay un solo candidato y dos posibilidades: que gane el concurso o que éste sea declarado desierto. La elección del vicepresidente del Consejo del Centro Regional, por otro lado, se ha vuelto un punto polémico: tres de las entidades de la Mesa de Enlace y el CEER expresaron su oposición a la designación de un representante del Gobierno provincial.Danilo Lima
El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) ha sido noticia y ganado espacio en los medios de comunicación en los últimos tiempos, básicamente, por los intentos del oficialismo para expropiar tierras de la institución, primero, y, después, por el proyecto de ley que pretende excluir del Consejo Directivo nacional a los representantes de las entidades gremiales del campo. Ahora, además, se sumó la supuesta intención de traspasar 100 hectáreas del INTA Castelar al Municipio de Hurlingham, en la provincia de Buenos Aires.
En nuestra comarca, sin embargo, el INTA es noticia en estos días por otros motivos: en primer lugar, la elección del director del Centro Regional Entre Ríos (CRER), dado que su actual titular, Guillermo Vicente, ya cumplió su mandato; y, en segundo término, la designación del vicepresidente del Consejo del CRER, cargo que hoy ocupa el médico veterinario Exequiel Alvarenque, director de Ganadería de Entre Ríos.
En la carrera por la sucesión de Vicente en la Dirección del CRER se anotaron inicialmente tres candidatos: Jorge Gvozdenovich, técnico de la Estación Experimental Agropecuaria Paraná; Oscar Valentinuz, quien ocupara ese cargo en el período 2013-2017; y Vicente.
Gvozdenovich quedó fuera de carrera por no cumplir con la antigüedad exigida en materia de manejo de presupuesto, y, más tarde, Valentinuz decidió “bajarse”. Sólo quedó Vicente.
El hecho de que haya quedado un solo candidato en la grilla, vale remarcarlo, no invalida el concurso. Ahora bien, pueden suceder dos cosas: que ese único candidato gane el concurso, o que su propuesta no conforme a los integrantes de la junta evaluadora y el concurso sea declarado desierto; en este hipotético caso deberá nombrarse a un director interino hasta la eventual nueva convocatoria. “Ambas posibilidades pueden darse”, dijeron escuetamente fuentes consultadas por CÓDIGO CAMPO.
El próximo viernes 17, en definitiva, se sabrá quién conducirá el INTA en Entre Ríos durante los próximos cuatro años.
El vice.
La elección del vicepresidente del Consejo del Centro Regional Entre Ríos, en tanto, ha generado polémica y cuatro entidades salieron a expresar su desacuerdo en que ese lugar sea para un representante del Gobierno provincial.
El actual vicepresidente, como señalamos, es Alvarenque, y como el gobernador Gustavo Bordet ya firmó el decreto para que continúe como consejero en los próximos dos años, está facultado para continuar en el cargo si así lo resolvieran sus pares.
El presidente del Consejo del CRER, Ricardo Garzia –representante de la Federación Agraria Argentina (FAA)–, según supo este portal, ha propuesto la continuidad de Alvarenque, algo que rechazan enfáticamente la Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (Farer), el Distrito Entre Ríos de la Sociedad Rural Argentina (SRA), la Federación Entrerriana de Cooperativas (Fedeco) y el Consejo Empresario de Entre Ríos (CEER) que, como la FAA, tienen representación en el Consejo.
La posición de estas cuatro entidades, explicaron en un comunicado, “no es personalizar una determinada participación” en el Consejo del Centro Regional Entre Ríos del INTA, sino que “consideramos que la injerencia gubernamental, cualquiera sea su origen, desdibuja la independencia que debe tener una entidad tecnológica dedicada a mejorar la producción agraria”.
Un representante estatal en la conducción, a juicio de Farer, la SRA, Fedeco y el CEER, “no podría mantener una conducta que no coincida con la de sus mandantes, es decir con el gobierno de turno. Y ello, en la experiencia de nuestro país, no significa lo mejor para el área agroindustrial”.
Y, para abonar esta argumentación, recordaron que “existen iniciativas en el pasado reciente que buscan expropiar tierras a diversas Experimentales del INTA (Salta, Catamarca, etc.) como así también proyectos que pretenden restar sus voces independientes”.
Por esa razón, “las entidades firmantes, miembros del Consejo Regional Entre Ríos del INTA, no estamos de acuerdo que ocupe la vicepresidencia un representante del Gobierno provincial”.
El comunicado está rubricado por Farer, la SRA, Fedeco y el CEER, pero no por la FAA.
Esta polémica no es nueva. Ya se dio hace un año cuando Alvarenque –tras una ajustadísima elección que terminó a su favor con el doble voto del presidente Garzia– fue electo en su actual cargo, en reemplazo de Edgardo Barzola, representante de Fedeco.
Las entidades, en aquel momento, señalaron que se rompía una tradición tácita que suponía que la presidencia y la vicepresidencia del Consejo del CRER correspondían a las organizaciones que representan a la producción agropecuaria.
Vale recordar, en este sentido, que Alvarenque no es el primer caso de un vicepresidente del sector público. Victorio Firpo, por ejemplo, ocupó ese cargo siendo subsecretario de Asuntos Agrarios de Entre Ríos, y Pedro Barbagelata (padre) y Ricardo Amavet también lo ocuparon en representación de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER).
Todo se resolverá, en definitiva, este jueves cuando el CRER realice una reunión especial para la designación de su número dos. Si es que no hay sorpresas de último momento.
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