Bernaudo habló del impacto de la recesión en Entre Ríos

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Los números de la economía nacional, cuando el país transita una crisis durísima, son cada vez más preocupantes e impactan de manera negativa prácticamente en todas las actividades, sean del rubro productivo que fueren. La pregunta, en este marco, es cómo está la provincia en medio de esta tempestad.

El ministro de Desarrollo Económico de Entre Ríos, Guillermo Bernaudo, durante a una entrevista con el programa En El Dos Mil También, que conducen Antonio Tardelli, Sebastián Martínez y Juan Cruz Varela por Radio Costa Paraná (88.1), admitió que la provincia “está sufriendo claramente una recisión” que se traduce en la caída de la actividad económica y en la recaudación

“Esa caída, además, la percibimos en la coparticipación, que también sufre desde IVA y Ganancias. Lo tenemos medido, impacta en el presupuesto provincial, pero lo más preocupante es el impacto en la vida de los entrerrianos y en la capacidad de seguir funcionando”, señaló Bernaudo, y agregó: “Hay muchas actividades que tienen una continuidad biológica, como las agropecuarias, que tienen mucho peso en la provincia, pero que también hoy están sufriendo algunos problemas, en algunos casos por los precios internacionales en baja y también la brecha cambiaria que complica a muchas actividades que son esencialmente exportadoras, como son las nuestras agropecuarias, de todas las escalas, las regionales también como la miel, el citrus y muchos de los productos regionales con un componente muy alto de exportación”.

– ¿Qué sector es el más afectado en Entre Ríos, o el que peor la está pasando en este contexto general?

– Creo que el embudo donde se concentra esto es en el comercio, sobre todo en el comercio minorista, ahí es un lugar donde se concentra toda la problemática, y de ahí van derivando. Tuvimos, por ejemplo, la “mala suerte” de tener una excelente producción de cítricos dulces, de mandarinas y naranjas, con un 20/30% más de producción de lo esperado, y nos agarra con una caída del consumo. Y la tenemos que tirar porque la gente está consumiendo mucho menos.

En la industria láctea estamos, por cuestiones estacionales más la seca del año pasado, con una baja producción de leche: 11% menos está produciendo Entre Ríos y 12% el país, o sea, estamos en las generales del país de menor producción.

Uno diría, bueno, esto tendría que levantar los precios para el productor porque son menos litros, pero por la gente está consumiendo mucho menos leche.

La única actividad que en este aspecto está un poquitito más compensada, por la desgracia de otras, es la producción avícola, de pollos. Y el cerdo está bastante complicado porque crece un poquito el consumo, pero no el precio, y la carne vacuna está con baja del consumo.

Entonces, estamos en un escenario donde, reitero, el tema del gran embudo es el comercio, porque cuando se consume menos leche, menos naranjas, menos carne vacuna, el comerciante, obviamente, se siente el impacto muy fuerte.

La industria

– ¿Qué lectura hacen de los datos a nivel nacional? ¿Cómo está la actividad industrial en Entre Ríos?

– Hay que ver cada tipo de industria. Entre Ríos tiene una parte muy fuerte de procesamiento de alimentos como componente de la industria, y también la metalmecánica.

La metalmecánica es mayoritariamente de bienes de capital, o sea, no somos grandes productores de línea blanca, sino que somos productores principalmente de bienes de capital. Y todo eso está también muy resentido porque lo que no se está haciendo es invertir en bienes de capital.

Y entonces ese sector industrial, más propiamente, más típicamente industrial, está con un movimiento también muy, muy bajo y capaz que con niveles que caen más allá del consumo, porque el consumo siempre tiene un componente de piso, que hay un mínimo que la familia consume. No se puede parar a cero la venta de alimentos, pero se puede parar a cero la venta de acoplados. Así que esos sectores están muy golpeados.

– ¿Qué se puede hacer desde la Provincia ante un contexto recesivo tan marcado con las políticas públicas que impulsa el Gobierno? ¿Qué herramientas tiene a mano?

– Las herramientas que tenemos son limitadas, obviamente, porque yo diría que las herramientas que tienen las provincias en este aspecto, cuando la macro es la que está mandando, logran impactar poco.

Hemos puesto en marcha con algunos recursos escasos, pero que han tenido un nivel de respuesta, es algo de financiamiento con alguna mejora en tasas, para maquinaria agrícola, para bienes de capital a través del CFI, y algo de subsidio de tasas en el Banco Entre Ríos.

– El argumento del Gobierno nacional es que los bancos dejarán de financiar al sector público y va a haber una lluvia de créditos para el sector privado. ¿Cree que es un escenario factible?

– Creo, o espero, que en el mediano plazo lo sea. No será en el corto, porque los bancos prestan lo que reciben de los ahorristas, y la capacidad de ahorro está muy acotada, y los ahorros por toda la macro también son de muy corto plazo.

– Y, además, si hay algo que ha hecho el Gobierno nacional en otra variante de la licuadora es desalentar o desestimular el ahorro en pesos.

– Claro, por eso, entonces los bancos no tienen mucho que prestar. Nuestro sistema financiero es microscópico, no digo comparado con Suiza, digo comparado con Chile, Uruguay o Brasil.

Es cierto que hay una baja en las tasas porque hay necesidad de los bancos de colocar algo de lo que tienen. Y eso nos ha permitido subsidiar algún puntito, donde un subsidio de cinco puntos, que antes no significaba nada, hoy significa una participación importante para tasas del 20%.

Otra línea de trabajo en la que estamos es no dejar lo de mediano plazo, o sea, nosotros tenemos que esperar que haya una reactivación de la economía. Entonces estamos con algunas líneas, por ejemplo, en lo que hace a bienes de capital, vinculado a la industria metalmecánica y otras industrias, juntando a sectores industriales con proveedores de menor escala. Hay muchas cosas que se fabrican o se podrían fabricar en Entre Ríos para alguna de las economías fuertes

Estamos por tener ahora, este jueves, la segunda reunión en Viale de proveedores de material para la avicultura con los grandes jugadores de la avicultura.

Entonces, por ejemplo, hay algún sistema de hornos que alguien en María Grande que los ha desarrollado, que le sirve a la industria, que una o dos de las industrias grandes avícolas los están usando con muy buen resultado. Bueno, que eso se propague y hagamos una especie de clúster. Sumar en la cadena de valor, no solamente el que faena los pollos, el que cría los pollos, al que tiene las ponedoras y al que tiene el maíz, sino a los proveedores intermedios maquinaria para alimentos.

La reactivación

– ¿Por dónde cree que puede llegar esa reactivación con la que usted sueña? ¿O es más una expresión de deseos que pronóstico?

– Tiene un componente muy grande de expresión de deseos. Y de la parte objetiva posible o planteable, claramente necesitamos una expansión de la exportación. Ahí habrá que ver, el atraso cambiario era la brecha que comentaba yo al principio de todo. Es esa brecha y ese atraso. Esperemos que algunas de las normas que han tomado ahora y que sean de corto plazo sirvan para solucionar la brecha.

Hay un compromiso de terminar con el cepo, que sería terminar con la brecha, entre septiembre y fin de año. Son los hitos que espero que pasen para que las cosas cambien.

Y el paso siguiente es una reducción de retención, el derecho a exportación, que para la provincia no lo vemos, pero pesa un montón. Es un montón de circulante, que eso también tiene que ver con el consumo local. Porque si una hectárea de Diamante de agricultura le entrega un tercio de su producción a la nación, y eso no vuelve ni como coparticipación a la provincia, es liquidez que se pierde.

En cambio, si esa plata queda en el bolsillo de un productor, y el 60, 70 u 80 por ciento, según distintos trabajos, lo gasta en la provincia, es reactivación de la actividad económica también local.

Entonces creemos que por ahí, por esas líneas, puede haber algún movimiento en lo que es exportación.

– ¿Cómo miran los empresarios entrerrianos la aprobación de la Ley Bases, la reglamentación, si cambió algo en su día a día?

– En el día a día todavía no ha cambiado nada, que yo sepa, o que haya percibido en las conversaciones. Lo que sí hay es alguna expectativa, en algunos temas de mejora en el tema laboral, aunque falta ver la implementación.

Y hay alguna expectativa de que, en algún momento, las propuestas para inversiones vayan más allá de los RIGI y atiendan también a las pymes. Porque no sé cuántas inversiones de 500 millones de dólares va a haber en la provincia.

– Una consulta política respecto a lo que está pasando en lo partidario. Hoy Patricia Bullrich dijo que La Libertad Avanza ya absorbió al PRO.

– La verdad es que de la política partidaria estoy un poco distanciado porque tengo la cabeza en la gestión. Sigo siendo parte de la comisión de la mesa del PRO provincial. Y al PRO provincial no lo absorbió nadie, está muy firme y muy activo, sigue vivo, por supuesto, con mucha gente muy abocada a la gestión, pero el partido sigue vivo y no lo absorbió nadie.

Fuente: Radio Costa Paraná.

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