Preocupa al Soever el “mal funcionamiento” de Vialidad

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El funcionamiento de la Dirección Provincial de Vialidad (DPV) es constantemente objeto de análisis por parte de los productores agropecuarios pero también de los ciudadanos que forman parte de lo que genéricamente se denomina ruralidad.

El mal estado de las rutas y los caminos provinciales –cualquiera lo puede certificar cuando los transita– es una realidad incontrastable desde hace muchos años. Pasan los gobiernos, pasan los gobernadores, y los problemas lejos de solucionarse pareciera que se profundizan.

Las críticas desde el sector agropecuario son, en ocasiones, demoledoras, pero en los últimos días, acaso para sorpresa de muchos, el propio Sindicato de Obreros y Trabajadores Viales de Entre Ríos (Soever) se sumó a los cuestionamientos, levantó la voz y expresó públicamente su preocupación ante lo que consideran un “mal funcionamiento” de la repartición.

Fue durante el último plenario del que participaron secretarios ejecutivos e integrantes de la Comisión Directiva del gremio, tras el cual se elaboró un documento con las conclusiones y en donde se plasma el malestar de los trabajadores.

El Soever hace eje en “la falta de recursos humanos y materiales, trabas burocráticas y el poco compromiso de los directivos para resolver los graves y variados problemas que significan mantener una red caminera como la que actualmente tiene la provincia”.

Personal

Los sindicalistas aseguran que “estamos muy lejos de llegar a la cantidad ideal de trabajadores por kilómetro de camino conservado, para poder dar cumplimiento de manera óptima a la extensión de la red caminera provincial de más de 28.000 kilómetros de caminos entre red primaria, secundaria y terciaria” de los cuales, recuerdan, poco más de 1.900 son pavimentados. El resto se compone de caminos mejorados y la gran mayoría –aproximadamente 24.000 kilómetros– son de suelo natural y es por ellos por donde sale la producción.

Las Zonales, remarcan, que son la primera y principal herramienta para la conservación de los caminos, “necesitan mecánicos, operarios de maquinaria vial y obreros especializados”, pero a la vez es necesario “dotarlas de una mayor autonomía operativa y de decisión, capacitación del personal y equipamiento”.

Falta de fondos

Los sindicalistas, asimismo, hacen notar en el documento otro tema que “nos ocupa y preocupa”: la falta de fondos indispensables para llevar a cabo las tareas.

“Nos referimos específicamente a los fondos solicitados con la finalidad de adquirir repuestos y accesorios para las máquinas, combustibles (insumo esencial), y hasta para el pago de gastos corrientes como son los servicios de agua, luz y otros insumos básicos”, denuncian.

Los sindicalistas, además, subrayaron que estos problemas han sido planteados “ante las autoridades” de la repartición, y, al mismo tiempo, han remarcado que la DPV “cuenta con un presupuesto reducido para su funcionamiento, lo que ha derivado en la falta de respuesta a la red caminera provincial”.

Recordaron, en este sentido, que a través de la Federación Argentina de Trabajadores Viales (FAT VIAL), presentaron un proyecto de ley que tiene estado parlamentario en el Congreso Nacional, destinado a recuperar los fondos específicos provenientes del Impuesto a la Transferencia de los Combustibles (ITC) para las distintas Vialidades provinciales.

Al cerrar el documento, Soever subrayaron que los trabajadores quieren “ una Vialidad activa y con posibilidades de respuestas a las demandas de la sociedad, ya que es una herramienta fundamental para el desarrollo y la producción entrerriana, pero no nos quedamos en el simple enunciado o expresiones de deseos, remarcamos que estamos a disposición como entidad gremial para reforzar la cultura del trabajo vial, y que el desempeño de nuestros trabajadores se desarrolle de la manera más eficiente”. Para ello, sin embargo, “es necesario contar con los elementos acordes y un acompañamiento de los directivos”.

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